Los karts ejercen sobre muchos de nosotros una rara fascinación, aún desde pequeños, tal vez por su parecido a un auto pequeño, como de juguete. Pero los karts no tienen nada de infantiles; es más, es un deporte difícil y ampliamente practicado en todo el mundo, con campeonatos mundiales organizados periódicamente. Pero, comenzando desde el principio, ¿qué es un kart?
Un kart es un vehículo pequeño, de un solo asiento, sin techo ni sistema de suspensión, impulsado por un motor de un solo cilindro. Tiene tracción posterior y las ruedas delanteras se encargan sólo de la dirección.
La disciplina deportiva sobre la que se basa su uso recibe el nombre de karting, y se practica 
sobre circuitos que pueden tener hasta 1700 m de longitud y 15 m de ancho. Las competencias pueden acoger hasta 34 karts en una misma carrera.
La institución dedicada a estandarizar la práctica del karting y a determinar sus reglas recibe el nombre de Comisión Internacional de Karting, y es parte de la FIA (Federación Internacional de Automovilismo). Las últimas directivas importantes dadas por la CIK fueron los cambios en las categorías del karting.
Así, existen las categorías KF1, KF2, KF3 y KF4 (ésta última es la básica), así como la KZ1 y KZ2 (superiores). En las categorías KF, los karts tienen motores de 125 cc, sin caja de cambios y refrigerados por agua o aire. Cada categoría KF se diferencia de las otras por sus especificaciones técnicas, referidas a los silenciadores, carburadores, número máximo de revoluciones y otros. En las categorías KZ se utilizan motores con la misma cilindrada pero con caja de cambios y refrigerados por agua.
Debido a lo peligroso que resulta practicar el karting por la posibilidad de un vuelco o un choque y a falta de
carrocería, es indispensable que el kartista tenga el siguiente equipo de 
seguridad:
* Casco.
* Protector de cuello.
* Protectores de codos y rodillas.
* Chaleco protector de costillas.
* Guantes.
* Botas altas.